Como dos nada extraños...

jueves, 25 de marzo de 2021

Campaneando

Ya no está el conventillo en Corrientes y Gallo ni la peluquería donde lagrimeaba para obtener una docena de  trenzas estilo boxeadora . El Super Chino sigue en frente  sobre la avenida mientras , de aquel  Emergente Bar - en el barrio del Abasto,  poco alboroto es el que  emerge: ni la vereda risueña ni besos entre cervezas. 

En la parada del 71 sobre calle Sarmiento  un par de hojitas secas y entre la caminata , vas descubriendo el paso que se acelera mientras,  potente te sacude un tango  , un tango al aire . Tango  tan de todos como tan  de nadie. 

"La milonga del Parque de la Estación está linda los miércoles " - me dijo una amiga y , ahí fui ;  luego de trescientos setenta y seis días de mi último abrazo en marco milonguero. Fui para no seguir muriendo: luego de decidir poner vida y movimiento en  esta ciudad que tanto amo  y en donde  hoy insalubre me siento. 



Me ubiqué en un banquito de hormigón junto a una mesa con tablero de ajedrez. Y jugué: jugué a ver , a encontrar, a buscar mis propias piezas, a intentar armarme entera.

Me calcé zapatos y di algunos pasos. Necesitaba tacos , clavarme aún en el pasto , sin baile ni abrazo .  

Y, no pude. No  tuve deseos de abrazar a ninguno de los dos hombres que se me acercaron con intenciones de bailar. No quiero bailar por bailar !, no necesito un  baile caramba!. Solo y tanto como  estar  entre un tango y  un otro de manera  cercana, honesta  latiendo a la par.  Es tan poco o complicado ? , hay más? .  Mover en aparente quietud. Y no se...No se... Creo que tal vez había uno por ahí en la misma frecuencia pero por un lado no usaba barbijo y estoy como desconfiada para  romper de pronto mi abstinencia - ya "virginidad milonguera" devenida por este tiempo de pandemia . 

Me encantó volver al ruedo: : otra vez la muchedumbre , la noche,  la risa , el saludo, la juntada y el como si no hubiera pasado nada...Y el colectivo con lluviecita , mi espalda mojada, la SUBE gastada  ...  Empieza mi tarea de deambular, frecuentar, pispear la oferta milonguera que hay... Y escribir  para sanar y danzar con palabras que , al fin y al cabo es lo que bastante hay. 




(Si tenés sugerencias a donde puedo ir a chusmetear   , chiflá nomás). 







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