Como dos nada extraños...

jueves, 28 de agosto de 2014

Buenos Aires

Suerte que me encuentra ya sin suerte
Triste porvenir – dirán algunos,
Dueña de un calambre que detiene
Trajín desorbitado entre tu gente.
Rompeme que da gusto sentir que me detengo
Dejame hecha una estampa entre el asfalto…
Pasame por encima, pisoteame;
ahora puedo verte Buenos Aires…